martes, 28 de abril de 2009

El Recreo Literario



“Puedo empezar relatando esta experiencia desde diferentes puntos. Podría partir desde cómo organizamos, o bien, de los resultados; podría partir haciendo una descripción de la institución y del clima que tenía, podría hacerlo desde mis propias percepciones… pero prefiero hacerlo desde las miradas. Desde aquellas miradas, un poco desconcertadas e interrogativas de los adolescentes que se encontraban en clases cuando hacíamos los preparativos para dar inicio al recreo literario.



Mientras organizábamos el kiosco de palabras no pude evitar dirigir la mirada hacia los salones de clases. Cada vez que lo hacia me cruzaba con la mirada de algunos alumnos que me ofrecían una mirada interrogativa, como preguntándome qué es lo que estábamos haciendo. Dejaban ver su curiosidad y, a la vez, su desconcierto.”(…)



Cuando entró la batucada, el zanquista y el animador, con un toque de histrionismo, los alumnos, salieron de los salones de clases, se pararon en las galerías a mirar el espectáculo que se desarrollaba en el patio. Aun no comprendían, se miraban unos a otros y se preguntaban entre ellos sobre lo que acontecía. Era de hecho que esto iba a suceder. No es para nada “natural” que en una institución educativa, se desarrollen espectáculos como aquel. Y, quizás, haya sido esto lo que los intimidó un poco, al principio.



El animador los invitaba a bailaren en el patio y a que formen parte de la “fiesta”, pero se negaban a participar. Lo mismo ocurrió cuando los invitó a recorrer el kiosco de palabras. Demoraron en acercarse, primero unos, después otros hasta que perdieron por completo la timidez y se animaron a recorrer cada uno de los “puestos” en busca de los textos que más les llamaba la atención.



Así, ese recreo literario se transformaba en otra posibilidad para acercarse a la lectura, en otra “gran ocasión”, en un tiempo y un espacio para que la lectura tenga lugar, para que los adolescentes tengan un encuentro con los textos y se animen a viajar por ellos. Todo esto fue el recreo literario. Creo que, logramos crear la Gran Ocasión de la que hablaba Graciela Montes.”


Agustín, relato de experiencia




El Kiosco de Palabras



Pasen y lean...acerquense y compre.




Todas las noches. (Aldo Luis Novelli)
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Espero que los ruidos interiores
se acallen,
que la casa se duerma
y la calle se silencie.
Espero que los ángeles detengan su vuelo
que los dioses se distraigan
y los hombres se desnuden.
Cuando todo está dispuesto
tan sólo me apoyo en la pared,
y sufro en la espera
lo terrible del silencio.
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PRECIO: La voluntad




Todas las noches.
(Precio pagado por uno de los chicos de la escuela Walter Adet)

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Nada parece ser de la forma en que solía ser.
Todo parece ser superficial.
Dios me da la respuesta en mí
Y me dice que alguien está observando a través de mí,
Y por eso es por lo que rezo,
Rezo porque algún día entienda el plan de Dios
Y lo que me ha hecho…
Pero tal vez algún día respiraré
Y finalmente veré…
Veré todo en mi bebé.
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Precio: ¿Quién crees que pronunció la palabra “Paz”?

Pagos de los chicos:

  1. La pronunció George Bush.

  2. La pronunció la tele



Pasen y lean...acerquense y compre.


EL ULTIMO
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Siempre llegué último a todo
al cine, al baile, al trabajo, a comer, a dormir.
Nunca pude ser el primero en nada.
Ni una sola vez pude ser el primero.
Pero mi mujer
descartó a los que estaban primero
a todos
siguió hasta el final de la fila
y me eligió a mi
que estaba último.
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PRECIO: A qué cosas o situaciones te gustaría llegar último?

  1. “Me gustaría llegar último a la iglesia para casarme.”
  2. “Me gustaría llegar último a viejo para concervarme joven y tener mucha minas”.
  3. “Me gustaría ser última en salir de mi casa para poder acordarme de que me estoy olvidando”
  4. “Llegar a mi casa para que no me reten”


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Táctica y estrategia.
(M. Benedetti)

Mi táctica es mirarte, aprender como sos,
quererte como sos.
Mi táctica es hablarte y escucharte,
construir con palabras
un puente indestructible.
Mi táctica es quedarme en tu recuerdo
no sé cómo, ni sé con qué pretexto,
pero quedarme en vos.
Mi táctica es ser franco
y saber que sos franca
y que no nos vendamos simulacros,
para que entre los dos
no haya telón ni abismos.
Mi estrategia es, en cambio,
más profunda y más simple;
mi estrategia es que un día cualquiera
no sé cómo, ni sé con qué pretexto
por fin me necesites.
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PRECIO: Cuál es tu táctica y cuál es tu estrategia?

  • “Mi táctica es dirigirme a hablar de
    frente hacia la otra persona”



  • "Me gustaría ser lágrima, para nacer
    de tus ojos, recorrer tu mejilla y morir en tu boca





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